CONCIERTO DE LA ALBORADA 2015AFILIACIONNações Unidas das Letras

Naciones Unidas de las Letras:

Deseo de paz,
tan anhelada paz...
Sueño fugaz de cada instante,
diario esperar
que amainen las tormentas.

¿En dónde pregonar que no queremos
ni sinsabor, ni muerte, ni ignominia?

Poeta, hermano de alma y de palabra,
vamos por nuestro mundos cotidianos
engalanados con sonrisas nuevas
y démosle la mano al que decide
con su limitación cruzar la calle.

Sabes?

El caminante, el niño o el anciano
aguarda tu mirada dulce
más que un trozo de pan o algún poema...

Piensa en el hoy que es realidad
y en el mañana construido a brazo fuerte
que el pasado descanse en paz,
¡No más pasado, vamos adelante...!

Poeta, hermano en la palabra,
que no te quedes remando entre los signos:
ablanda el seño, endulza tu mirada
y sonríe... sonríe ante tu espejo,

sonríe siempre al que miró tus ojos...
si no lo hizo, sonríe también
porque tu gesto es huella
de la infinita paz
que guarda el alma.

"¡No más palabras!"

Hechizos
Cuando era niña -tiempo ha-
me embelesé mirando las estrellas,
sintiendo el viento
en su vuelo sutil hacia el misterio;
escuchando, en silencio,
las tonadas del río
donde en muchas mañanas
refresqué mi inocencia;
viendo jugar la espuma,
mirando las montañas a lo lejos
y el cielo gris-nácar-azul
bañándose en bermejos
hacia el anochecer...
(Hoy, todavía los ríos
podrían cantar igual)...
Los gritos en la loma
preguntándole al eco
y la habitual respuesta
envuelta en los cantares
del mirlo y la torcaza.
El viento fugitivo
en su paso al misterio.
Los grillos parlanchines
cantando en la ventana;
la luciérnaga inquieta
como gota encantada.
Las estrellas,
tan altas, tan cercanas
casi iguales
entregando
según la noche,
distintos resplandores.
El paisaje varía según las horas
pero ahí está contando las miradas
dejado ver sus maravillas,
mostrando luz y sombra
amarillez, sonrojos y verdores
como una geografía.

VILLANCICO CARIBE

A las orillas del Mar Caribe
Jesús, mi Niño, llegar quisiera.
El Padre Eterno atiende su ruego:
brinda la playa y su atardecer.

María descansa, siente en su entraña
el movimiento de un cuerpo santo
porque ya suenan los bullerengues
mapalé, cumbia, porro y chandé.

Cañas de millo gaita y tambores
güiro y maraca, cantan al viento,
aromas bañan los arrecifes
porque se acerca la Navidad.

San José Santo, pleno de afanes,
entre la arena labra la cuna,
dobla las ramas de una palmera
y el techo amado logra formar.

Llega la hora del nacimiento:
corales, peces de varios tintes
los hipocampos y caracoles
ven al Dios Niño alegre nacer.

Por sobre el tallo de la palmera
muy lentamente sube una estrella,
sus cinco puntas beben luceros
¡Brilla la estrella, estrella de mar!

UN DIA PARA RECORDAR

 

COMO SI YO NO SUPIERA...

Hoy... en tu día de sol en el cenit...
¡Cuéntame de ti! Hazme saber cómo haces
para lanzar destellos prodigar encantos.

Dime lo que ya sé...que son de amor
retazos de tu cielo fulgores de tus sueños.

Dime lo que ya sé...que de no ser los tuyos,
ISABEL ESPINOSA PEÑA
No buscaría en esta tierra
lo que tan solo existe en tu esbeltez.
Dime cómo puedes tú vencer el Tiempo
y esperar que llegue fatigado
a ver tu amanecer.

Dime mujer cómo puedes ser playa
retener la ola
hacer temblar la inmensidad marina
y navegar sin capitán ni marineros...

Dime lo que ya sé.
Que eres campeona de carreras largas.
Adalid en los relevos.
Domadora de los vientos malos...

Dime lo que ya sé...
Que de no saberlo creería
que estoy soñando con Irene
Penélope, con Venus y Olympia
y con las Horas y las Diosas todas.

Dime lo que ya sé...Que no eres diosa...
que eres ¡Mujer! Simplemente, Mujer.

Eso eres. Porque te puedo querer
salir contigo al bulevar de los deseos,
caminar por la vereda de tu audaz andanza...

Dime lo que ya sé.
Que tienes débil la estructura humana,
fuerte el alma...
Que te duele lo que duele...

¡Y lloras como lloro yo!

Sé que tienes en tus venas una hoguera.
Sé que prende en las cumbres del saber...

Que tienes esplendores payaneses
Que tu mano es una espada
que traza coyunturas en la dorsal
de las tristezas...desdeña tempestades--
no temes usarla para amainar torpezas.

Dime lo que ya sé. Que jamás creció en ti
la niña que te habita...
Dime mujer lo que ya sé.
Que en ti solo crecen rosas lilas
y claveles rojos y catleyas...
Que en tu tallo no hay espinas.

Dime lo que ya sé.
Que en ti amanecen los ocasos
y se duermen las tristezas
en el remanso de tus dulces ojos.

...Dime algo que yo no sepa ya.

Joseph Berolo
8.3.13


ISABELITA.jpg

VAMOS

Salgamos a la calle
con una gran sonrisa
y disfrutemos
del sol y los chubascos.

Despacio,
paso a paso
en el llano o el bosque
o en la arena;
sobre los adoquines
o por los corredores
donde la vida pasa
llevándose consigo
los instantes que huyeron
entre risa y lamento.

Como experiencia nueva
vamos silbando todos
una canción querida
en murmullo armonioso,
peregrino.

Vámonos de la mano,
igual que adolescentes
de los tiempos antiguos
y como los venados
uniendo sus cabezas,
miremos el ocaso
mientras llegan estrellas
escoltando la noche.


PLEGARIA

Muéstrate Dios de Paz, todos esperan.
Borra en el mundo el signo de la muerte,
el odio, hostilidad y todo encono.

Déjanos ver la luz y la alegría
al confirmar que al expirar el crimen
acabarán el odio y la tristeza.

"La paz sea contigo", repetimos
y mil responderán "y con tu espíritu".

¿En dónde Dios, en dónde las palabras?

¡Duele, Dios, duele!

Marca tu fuerza, Tú lo puedes:
la "Paz Universal" vendrá a nosotros
repitiendo y enviando su mensaje.

¡Dios!

Que no se resquebraje la ternura,
que la impiedad sucumba entre las Patrias
¡Señor, llegó el momento!

Isabel Espinosa P.
Caminos Silenciosos
Miembro Fundador
Naciones Unidas de las Letras
Colombia


Copyright-Escribe Susana Roberts

Querida Isabel
¡Bellísima tu plegaria!
Estoy abrazada a ella...
Hace algún tiempo escribi esto:

La Paz os doy
suplican los recientos
y en las calles
el miedo y la violencia
quieren aplastarla

¡Ay, que disgusto tiene
esta alma mía!
parto con ella a todo rumbo
no la dejo agonizar

Piensa hermano
tú eres hombre libre
yo solo instructor
de un noble sueño

no la ahoguen
se partirá el cielo de rojo
se morirán niños
sin beber de ella

No es de Dios pelear
solo basta dar vueltas
las páginas de un salmo
mirar sin agravios
como arde esta sed
en el seno de todos

¡Qué que no se acaben los voceros!

¡La Paz os doy!
¡Contemplad la Paz!
¡Templad la Paz!
y aunque tengáis que pregonar por siglos

¡No dejéis huir la sagrada Paz de vuestro ser!

   No quiero irme

Sabes que estoy aquí
por nueve meses.
(Por tantos años
seguiré en tu alma).

Sientes mi pulsación
casi, inaudible;
respiro con tu sangre
y me despojo
de todo intento
de salir del nicho.

No es tiempo todavía...
Debo seguir aquí
en tu vientre sacro
acaparando el tibio abrazo
de todas tus partículas
en parte mías.

Un suave gozo vivo en tus entrañas
y tu abrigado lecho es mi refugio.

¿Producto de tu amor?
Solo tú sabes...
¿producto de tu error?
no soy culpable...
¿del error de otro ser?
no lo comprendo...

Vida seré para tu vida
cuando beba en tu seno
asido a tu pezón y a tu caricia.

Déjame ser,
mirar tus ojos
y sonreír y estar contigo

NOTAS AL MARGEN

LEYENDO A KOYAANISQATSI... DE JOSEPH BEROLO. He ahí el fundamento de este sueño tuyo que se va volviendo realidad en el preciso instante en que las palabras empiezan a volar contra el horror-guerra-muerte-miseria, como una "elipse en movimiento". Abarcas TODA la pesadumbre del hombre en su historia de soledad y muerte. No veo la hora de verla representada.--
 UNAMOS LETRAS Y ACTOS DE PAZ...Y para realizar acciones concretas, empecemos por los niños, SEMILLAS DE JUVENTUD, por los más niños,  a construir un canto de consonantes y vocales. Isabel Espinosa Peña, Asesora Cultural  del Proyecto Semillas del Colegio Cristóbal Colón, fundado y dirigido por Joseph Berolo y favorecido  por la Asociación Algo por Colombia.

 Cuánta alegría me da ser Miembro Fundador de Naciones Unidas de las Letras y esta inclusión en una página que mueve la existencia humana  y  ha de mover alma y espíritu de todos cuantos soñamos con  la paz universal en nuestro tiempo y para siempre.Dios bendiga esta obra y la palabra  de su fundador.    Va danzando su verso en un cielo-tierra como si caminara por  un cielo-cielo...  Agradezco a la vida por traer esta oportunidad a mi corazòn. Isabel Espinosa Peña.

No más

¡Leyenda desde siempre hondamente bruñida en sangre y alma! 
No más niños que esperan/con ojazos de llanto suspendido/ y otros tantos jugando/ a quedarse sin rodillas. /No más viudas con doble llanto/ entre las sábanas/no más madres viajeras/pidiéndole milagros a la luna. /No más caminos con la carga a cuestas/no más sendas tortuosas/andadas sin sosiego/no más padres llorando sus silencios. /No más fogones yertos/no más tierra improducta/no más horror/no más fantasmas/no más Patria en fragmentos./No más flores ni cirios ni banderas/cobijando las urnas funerarias./No más fosas cubiertas de maraña/no más ilusos callados por la muerte/¡NO MAS! ¡Dios!No más campanas/No más palomas/ni pañuelos blancos.  De su obra:  "Todos los Tiempos"   

isabel espinosa peña <isabeles2525@hotmail.com>,


MATICES Y CADENCIAS, POEMARIO 2014 EN PROX. EDICION,

ISABEL ESPINOSA PEÑA
isabekiuta.jpg
Caminos silenciosos... Por todos los tiempos

 

PONENCIA

¿POR QUÉ ESCRIBIMOS?
Isabel Espinosa Peña

Habla la soledad

Me envuelvo en soledad desde la aurora.
Adentro, intimas, las cosas danzan
entre el reposo y mis distintos pasos.

Vivo la placidez que cubre al árbol
cuando no está la brisa
marcando el movimiento.

Y de pronto,
a cualquier hora del día,
en cada anochecer y en cada aurora
un aire silencioso dice: ¡canta!
y va naciendo, entonces, la palabra.

Grata es la soledad,
amiga espiritual de los sentires,
dulce el silencio y sus cadencias.

Se ha dicho que escribir es el fenómeno humano más importante de los últimos 2.000 años: la revolución espiritual de la conciencia contemporánea.
Puede decirse también que cada poema, igual que cada acto que se realiza es energía que se libera. Por tanto, escribir es un paso que nos acerca al ejercicio de nuestra infinita libertad.
Al decir del escritor Guillermo Martínez González "La poesía es un golpe de estado contra la rutina y la superficie. Se origina en el silencio y vuelve al silencio en búsqueda de una palabra viva que profundice en las aguas del ser y el tiempo. Experiencia y revelación, historia y sueño; no cesa de indicarnos el camino del hombre, las huellas de su esperanza"

Más que oportuno me parece confirmar estas ideas con fragmentos de "El Poema" de Matilde Espinosa Fernández:

El Poema

"Para que tú nacieras
me sumergí en el fondo
donde habitan los gérmenes
que preparan el vuelo.
Antes que sea la flor,
tú ya lo sabes,
trabajan las raíces.

Para encontrar tu forma
mis manos te buscaron en la tierra
y aprendí que la voz,
la verdadera voz,
puede ser una rama,
un hilo de agua
o simplemente
la ternura humana...

Tu carne no es tan sólo de sueño,
ni de fibra retórica.
Podrías ser el hijo del pescador,
de la mujer que cose, llora o canta,
de la que alguna vez
se asomó a las estrellas
y sintió que en el pecho
le nacía una rosa.

Dime:
Cuando tocaste el aire
¿no fue primero el ruido de cadenas?
Cuando tu piel se hizo
¡no fue primero el llanto?...

Antes de tu venida
quise que fueras música
torrente desbordado de armonía"...

Si preguntáramos a la psicología, por qué escribimos:

Carl Jung, Psicólogo y Psicoanalista suizo (1.875 - 1961) lo plantea de esta manera:
"Sin duda la psicología -como ciencia de los procesos anímicos- puede ponerse en relación con la ciencia literaria. El alma es en verdad la madre y el vaso de todas las ciencias, así como de cada obra de arte. La ciencia del alma debiera, conforme a ello, estar en condición de señalar y explicar la estructura psicológica de la obra de arte, por un lado, y las condiciones psicológicas del hombre artísticamente creativo, por el otro. Ambas tareas son de naturaleza básicamente diferente: en el primer caso se trata de un producto "intencionalmente" conformado de complicadas actividades anímicas; en el segundo, empero, del aparato anímico mismo. En el primer caso es la obra de arte concreta el objeto del análisis e interpretación psicológica, pero en el segundo lo es el hombre creativo bajo la forma de la personalidad induplicable. A pesar de que ambos objetos están en la más íntima correlación y en indisoluble acción recíproca puede, no obstante, el uno no explicar el otro. Por cierto es posible llevar conclusiones de uno a otro, mas nunca son estas conclusiones forzosas"...

EL POETA
El secreto de lo creativo es, como el de la libertad de la voluntad, un problema trascendente que la psicología no puede contestar sino solamente describir. De igual manera es también el hombre creativo un enigma, cuya solución intentará uno por cierto de varias maneras, pero siempre en vano. Una y otra vez se ha ocupado la psicología moderna del problema del artista y su arte. Freud creyó haber encontrado una clave para aclarar la obra de arte a partir de la esfera de vivencias personales del artista. Acá se abren en efecto posibilidades existentes pues, ¿no debiera ser posible derivar una obra de arte de "complejos", de igual modo que, por ejemplo, una neurosis? Fue en verdad el gran descubrimiento de Freud que las neurosis poseen una etiología anímica enteramente determinada, es decir, provienen de causas emocionales y tempranas vivencias infantiles de naturaleza real o fantástica. Algunos de sus discípulos, especialmente Rank y Stekel, trabajaron con un planteo similar y obtuvieron resultados similares. No puede negarse que la psicología personal del poeta puede, en un caso dado, rastrearse hasta en las raíces y hasta en las ramas más externas de su obra"...

Y he extractado de María Zambrano Alarcón, ensayista y filósofa española (Vélez-Málaga, 1907 - Madrid, 1991) las siguientes consideraciones que destilan verdades:
"Escribir es defender la soledad en que se está; es una acción que sólo brota desde un aislamiento efectivo, pero desde un aislamiento comunicable, en que precisamente por la lejanía de toda cosa concreta se hace posible un descubrimiento de relaciones entre ellas. Pero es una soledad que necesita ser defendida, que es lo mismo que necesitar de una justificación. El escritor defiende su soledad, mostrando lo que en ella y únicamente en ella se encuentra.
Habiendo un hablar, ¿por qué el escribir? Pero lo inmediato, lo que brota de nuestra espontaneidad, es algo de lo que íntegramente no nos hacemos responsables, porque no brota de la totalidad íntegra de nuestra persona; es una reacción siempre urgente, apremiante.
Hablamos porque algo nos apremia y el apremio llega de fuera, de una trampa en que las circunstancias pretenden cazarnos, y la palabra nos libra de ella. Por la palabra nos hacemos libres, libres del momento, de la circunstancia apremiante e instantánea. Pero la palabra no nos recoge, ni por tanto, nos crea y, por el contrario, el mucho uso de ella produce siempre una disgregación....
Hay en el escribir siempre un retener las palabras, como en el hablar hay un soltarlas, un desprenderse de ellas, que puede ser un ir desprendiéndose ellas de nosotros. Al escribir se retienen las palabras, se hacen propias, sujetas a ritmo, selladas por el dominio humano de quien así las maneja. Y esto, independientemente de que el escritor se preocupe de las palabras y con plena conciencia las elija y coloque en un orden racional, esto es, sabido. Lejos de ello, basta con ser escritor, con escribir por esta íntima necesidad de librarse de las palabras...
Escribir viene a ser lo contrario de hablar; se habla por necesidad momentánea inmediata y al hablar nos hacemos prisioneros de lo que hemos pronunciado, mientras que en el escribir se halla liberación y perdurabilidad sólo se encuentra liberación cuando arribamos a algo permanente. Salvar a las palabras de su momentaneidad, de su ser transitorio, y conducirlas en nuestra reconciliación hacia lo perdurable es el oficio del que escribe.
Mas las palabras dicen algo. ¿Qué es lo que quiere decir el escritor y para qué quiere decirlo? ¿Para qué y para quién?
Quiere decir el secreto; lo que no puede decirse con la voz por ser demasiado verdad; y las grandes verdades no suelen decirse hablando. La verdad de lo que pasa en el secreto seno del tiempo, en el silencio de las vidas, y que no puede decirse. "Hay cosas que no pueden decirse", y es cierto. Pero esto que no puede decirse, es lo que se tienen que escribir.
Descubrir el secreto y comunicarlo, son los dos acicates que mueven al poeta.
El secreto se revela al escritor mientras lo escribe y no si lo habla. El hablar sólo dice secretos en el éxtasis, fuera del tiempo, en la poesía. La poesía es secreto hablado, que necesita escribirse para fijarse, pero no para producirse. El poeta dice con su voz la poesía, el poeta tiene siempre voz, canta dice o llora su secreto. El poeta habla, reteniendo en el decir, midiendo y creando en el decir con su voz las palabras. Se rescata de ellas sin hacerlas enmudecer, sin reducirlas al solo mundo visible, sin borrarlas del sonido. La poesía descubre con la voz el secreto"...
Personalmente: Por qué escribo: Es casi una necesidad. No lo hago con horario ni me propongo motivos ni ideas: Generalmente llega como un "tic" una idea constante, acalorada impaciente que no descansa hasta llegar al fondo. Después revisar y revisar y volver a sentir: ¿igual? ¿distinto?
Escribiendo, río a carcajadas, lloro, rabio, recuerdo y voy plasmando, guardando...
Bogotá, octubre 18 de 2013

 

DATOS BIOGRÁFICOS
Isabel Espinosa Peña nació en Páez, región de Tierradentro en el Departamento del Cauca. Inició su educación musical en el Conservatorio de la Universidad del Cauca en Popayán y continuó estudios básicos en el Conservatorio de la Universidad Nacional. Es egresada de la Universidad Pedagógica Nacional donde realizó Licenciatura con Estudios Principales en Pedagogía Musical, y en la Universidad Luís Amigó (Bogotá) obtuvo el título de Especialista en Farmaco dependencia. Formó parte de las siguientes agrupaciones corales:
Coro infantil del conservatorio de la Universidad del Cauca dirigido por el maestro Luis Carlos Espinosa, de adultos, también del Conservatorio dirigido por el maestro Wolfang Schneider; En Bogotá coro del Conservatorio de la Universidad Nacional dirigido por la profesora Elsa Gutiérrez; Ars Vocalis por el maestro Raymond Koster; Trébol de la Universidad Pedagógica bajo la dirección del maestro Isidro Pardo.

En el 2008 realizó en Bogotá (Auditorio del Banco de la República), Popayán (Banco de la República) y Cali (Biblioteca Centenario) el lanzamiento de su disco: "Desde el Alma" que contiene parte de su obra musical con temas de música colombiana: Balandina, Juanito sube ese Ánimo, Si Supiera, Sin Regreso y Queja en aire de bambuco; Cómo no Volver a Amar, pasillos. Por qué te vas, (canción) y los villancicos: Sonríe Jesús, y el Niño Jesús del Llano, trabajo presentado conjuntamente con el libro de temas para niños "Relatos de Isabel". El bambuco "Balandina", "Los Días" (texto de Matilde Espinosa Fernández) tienen arreglos corales realizados por los maestros Gustavo Yepes y Alfonso Ricardo. "Sonríe Jesús", "El Niño Jesús del Llano" han sido arreglados a cuatro voces por el maestro Diego Arenas, igual que la musicalización y arreglo del poema "La Cuna del Niño Dios", obras interpretadas en varias ocasiones por el Coro de Cámara de Popayán, dirigido por la Maestra Stella Dupont Arias. Dentro de su obra musical se encuentran himnos como el de Contraloría Departamental del Cauca con texto del doctor Álvaro Urbano, Colegio Cooperativo Ciudad de Popayán, Himno a Inzá y otros varios igual que canciones de cuna y canciones infantiles. Presentó el 19 de agosto de 2009, en la Biblioteca Nacional de Bogotá, el libro de poesía "Todos los Tiempos" y en la Biblioteca del Banco de la República de Popayán, el 14 de octubre de 2009. Su último poemario, CAMINOS SILENCIOSOS fue publicado recientemente  por la Editorial Ave Viajera y ha sido presentado exitosamente en Bogotá y en Popayán.  Se ha desempeñado como educadora musical en los sectores oficial y privado y en varias universidades de Bogotá.