Eli Eli Lama Sabactani
ELI ELI LAMA SABACTANI , TENGO SED,, SEMANA SANTA *
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TODO RENGLÓN SUBRAYADO ES VINCULO AL CONTENIDO DEL TEMA*
Fotografías,
imágenes, viñetas, sumnistradas por el editor, y.o el autor del tema ilustrado y.o de dominio público
sin marcas de derechos regustrados.
TENGO SED I AM THIRSTY* FORO DEDICADO EXCLUSIVAMENTE A DENUNCIAR LA GUERRA EN UKRANIA
Semana Santa 2023 FORO ABIERTO GRACIAS POR SU APORTE
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TRILOGIA DE SEMANA SANTA |
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SÁBADO SANTO
Vía crucis doloroso,
La cruz lo hicieron cargar Después
fue crucificado, En medio de dos ladrones
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 El cielo y la tierra entera se nubló al morir Jesús; Pero la fe verdadera abrazó
al cargar la cruz. Sábado de luto y llanto La
soledad de María El Nazareno
en su tumba Ven pronto Jesús bendito Cristina Oliveira Chávez © Copyright All Rights Reserved © |
hoy por hoy, algo cotidiano. En qué momento comenzó el hombre a dejar de mirar al otro con-pasión
y comenzó a mirarse a sí mismo con narcisismo desmedido?
Hace mucho fue. Cuando la ética se arrancó del diccionario para dar paso a la des-humanización,
que creció como una enredadera, arraigándose en las paredes de los valores al punto de asfixiarlos.
Cuando el otro pasó de ser hermano para convertirse en adversario.
Cuando la comunidad se in-visibilizó porque estaba inactiva, cada uno en su propio mundo,
en sí mismo, y perdió la noción de lo colectivo, de lo social, de humanidad.
En este contexto, una vez más nos toca "celebrar" la Pascua.
Sublimando tu enfermedad[2]
abrazaste el sagrado sentido,
bendiciéndola como oportunidad
de tu ser y su latido.
Admirable gracia y Don,
tu acción bendita.
Regalo de Dios
a los hombres y a tu familia.
Dicen que partiste...
Yo guardo tu alegría.
¿Cómo despedirte
si el Cielo te da la bienvenida.
Mensaje de Bien y Amor
fue tu corta existencia.
Más allá del dolor
palpita tu presencia
con la Bandera de la PAZ
en tus santas manos perenne,
consagrada a la inmortalidad
junto a tu alma por siempre.
Y en nuestro esperanzado corazón
un altar te elevamos,
Padrino de cada buena acción,
Patrono de jóvenes bienaventurados.
María Irene Giurlani
SEMILLAS DE JUVENTUD,,,,,, BUENOS AIRES, ARGENTINA
[1] CHRISTIAN FRITZ, 1989-2016, Embajador de Paz -distinción entregada por Mil Milenios de Paz
y Fundación Paz Ecología y Arte, apadrinado por Adrián Amatuci.
[2] Síndrome de Proteus, más conocido como Síndrome del hombre elefante. En Argentina: único caso.
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¡Tengo Sed!...,
o simplemente en el corazón donde Kuchi palpita por siempre. QUERIDO KUCHI -a la memoria de Christian Fritz [1]- ‘Eres un Sol' dije al verte, percibiendo en tu interior la más brillante Fuente. Aleteo de estrellas, Puente, poesía en tus pupilas, y tu sonrisa bella sobrevolando las heridas. Inefable candor, emanando de tu valentía. Ejemplo de Fe en el Creador sosteniendo tu bizarría. Es que conocí tu benevolencia erguida, dando sin pedir tu generosa luz encendida. Con solidarios proyectos y pasión, honrando la vida, enalteciste tu cruz. Con increíble entrega y exaltación ofrendaste, cual semilla, tu juventud, {
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“TENGO SED” (Jn.19, 28.30).
...Y Jesús, el hijo de José y
de María, aquel hombre, alto, fuerte, esbelto, con un cabello castaño y largo, es clavado en la cruz. Y en su
agonía, debido a la pérdida de sangre, agotado por los latigazos y suspendido de los brazos, se asfixia. Para
poder respirar, tiene que apoyarse en los pies y en los brazos, reavivando con ello, el dolor insoportable del clavo fijado
en medio de los pies y de las muñecas. Cuando ya no tiene fuerzas para realizar este esfuerzo, se debilita y pronuncia
“TENGO SED” (Jn.19, 28.30). Un soldado romano, coloca sobre una caña, una esponja mojada en una bebida
agridulce, consistente en una mezcla de vino y mirra, y se la acerca a los labios, pero Jesús la rechaza. Jesús,
es torturado por la sed.Sin embargo, Jesús, además de
su sed física, también le angustia otra clase de sed, la de que se realice en el
mundo, el Reino de su Padre.
Tiene sed, de conseguir que entre los hombres reine la comprensión y la tolerancia. Sed, de hombres y mujeres,
que se propongan vivir en la verdad, respetar y dar testimonio de la verdad, olvidando un mundo, donde por desgracia, impera
la hipocresía, la mediocridad, las falsas verdades y las mentiras.Tiene
sed, por conseguir que
entre los hombres, exista ese amor desinteresado, que le acompañen hasta el Calvario. Sed, de conquistar almas, que
luchen con los brazos abiertos, para vivir en un mundo, feliz, sencillo, humano, sin sonidos espectaculares, ni esperas de
recompensa, en definitiva, lograr un mundo mejor.
Jesús, tiene sed
de almas, que tomen su cruz y le sigan, como los misioneros, que
por amor a los que les necesitan, abandonan sus países, familias y comodidades, acudiendo en su ayuda para si es necesario,
regalarles hasta su propia vida. Sed, de los que aman, perdonan y ayudan a inmigrantes,
marginados, débiles, angustiados, deprimidos y enfermos, prestándoles su consuelo y esperanza.
Jesús crucificado, tiene sed… de tantas cosas.
“Con el evangelio
a la calle” desea, que esta Semana Santa de 2.010, sea totalmente diferente para ofrecer a Jesús crucificado,
un manantial de agua viva, limpia y noble, dentro de una Iglesia resucitada, para de este modo calmar nuestra sed de vida eterna, con Cristo resucitado.
VOLANDO HACIA EL ALUMBRAMIENTO
-Semana Santa-
En esta Semana Santa a pocos
días de Pascuas de resurrección que las mayores luminarias del cielo, el sol, la luna, de pronto desaparezcan
o cambien de lugar con tanta naturalidad, son acontecimientos fascinantes que nos indican sobre el misterio insondable de
l
esa
obra esplendida, maravillosa, perfecta, concebida por la mano de Dios. Nos da la idea de lo acabado, de lo absoluto, de lo
perpetuo y perdurable. Afirtunados quienbes pueden comprender el privilegio divino de acariciar o palpar el infinito
por la gracia de Tata Dios. Como, de pronto, casi al instante sin espacio de tiempo te encuentras en tu nido cósmico,
observando el prodigio espectacular, asombroso de un eclipse. Que además esos fenómenos celestes, estén
ligados y unidos de manera perenne a los ciclos de la vida y de la naturaleza en su totalidad. Pero el milagro celeste y espacial
que se vislumbra en esta semana bendita, desde el otero del espacio cósmico es colosal. El suceso astronómico
y galáctico que percibo es como una rueda hacia la eternidad. Redondel perfecto que ni el hombre todavía puede
estropearlo. Disfruto cual niño ante un obsequio en vísperas de un año nuevo mirando el esplendor del
cielo con fascinación. Desde mi morada cósmica el edén estrellado corrobora la obra suprema de una perfecta,
armoniosa y bella estabilidad. Platón y otros sabios a los que durante siglos consideramos con respeto sostenían
que las orbitas eran circulares. ¿Cómo no iban a serlo si el circulo es la más perfecta de las figuras?
En ese sentido soy un elegido. Es que en este raro fenómeno del desprendimiento espiritual que me ha sido concedido,
no solo puedo recordar, vivir y detallar los lugares y personas a donde me desplazo, sino que en mi viaje astral como un cordel
luminoso y extraordinariamente elástico puedo dimensionar lo maravilloso de la bóveda celestial. Puedo asentarme
en ella, tocar y percibir con mis manos y mi sentido estas esferas celestiales casi inmutables. Rastrear en mi vuelo a través
de la vía láctea los movimientos imperceptibles de los planetas y la posición inferida del sol. Acariciar
los corales lumínicos que casi se tocan para ser una imagen continua desde la tierra.
Es lo grandioso y extraordinario del infinito y
del espacio. Observar y arrullar la luna a las que todas las noches la vemos en su lugar con la sola variación debida
al transcurso del año. Distinguir los cambios en las cosas que procuran mejorar aunque esté supremamente consumado.
En este universo que representa lo inmutable, lo supremo y que responde a un plan eterno, he visto lugares, inmensurables,
distantes, inaccesibles, solitarios. Una insólita alegría. El extraordinario movimiento de esta semana predestinada.
Toda la naturaleza parece sentir una emoción de júbilo. Hasta los seres inanimados revelan un palpitar distinto
bajo una luz intensa que presagia la iluminación eterna. Las flores levantan sus corolas, las plantas con nuevo verdor
acarician suavemente los árboles que en un vigor nuevo esparcen sus fragancias y perfumes. He visto brotar fuentes
de agua desde la tierra hacia el firmamento y una estela luminosa que aumentaba sin cesar en claridad, elevarse hacia lo más
alto de los cielos presagiando la salvación. Arriba, en el espacio azul, un movimiento, extraordinario de glorias celestiales,
se acercan a la tierra y una fuente abundante de agua cósmica brota en el silencio del espacio, elevándose hacia
el Padre. Anunciando que el verbo, que se hizo carne, se elevara hacia el Altísimo para alumbrar definitivamente al
universo y a la humanidad. Observo, a la estrella Centaurea, perla celestial que se encuentra al oeste del Toro y de Erídano,
que se viste de gala ante el Eterno. Acontecimiento, con brillos de increíbles alteraciones. Veo a la celestial Ballena,
Mirabilis, esfera versátil y caprichosa que como un imponente cetáceo surca los mares celestiales en un imponente
coqueteo hacia el Supremo. A los Peces, y al Carnero, visibles desde mi morada cósmica, junto a la Cruz del sur, que
como en una gran misa cósmica desfilan implorando a Jesús el Nazareno por la humanidad salvada.
Las vuelvo a mirar y recordar
eternamente, como en una contemplación beatifica, atestiguando al igual que los griegos clásicos que el Kosmos
es espléndido, maravilloso, perfecto. En su magnificencia incomparable aprecio en esta semana consagrada un colosal
acoplamiento galáctico a las normas con que Tata Dios rige su funcionamiento. Mi ser espiritual como en los tiempos
en donde a Galileo también se le ocurrió mirar las estrellas se vuelve a disipar para volver a su estado
normal. Nunca podré olvidar esa efusión universal de energías luminosas, que irradia y recuerda al mundo,
que el creador y Salvador de la Humanidad es uno y único en una trinidad perfecta.
FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN.
Dr. Jorge Bernabé Lobo
Aragón
¡BUENOS DIAS MUNDO! . SEMANA SANTA 2020.
Ya siento desprenderse
el día
de
la noche que en su lecho lleva
aún latiendo, mis tristezas.
¡RESUCITÓ EL SEÑOR! ¡ALELUYA!